Conoce a Elena López Lanzarote
Hablanos un poco de quién es Elena / Unamesa
Siempre me ha gustado trabajar dentro del mundo del arte, dibujo desde niña y nunca lo he dejado de hacer. Hice Bellas Artes, escultura, escenografía, tuve una editorial y estudio de risografía en Barcelona llamado Lentejas Press. Me gusta hacer fotos analógicas, pintar muros con amigos y casi lo que más desde hace un tiempo, la cerámica.
En qué momento comenzaste con la cerámica? qué significa para ti?
Llevaba mucho tiempo con la espinita de la cerámica y por unas cosas u otras al final nunca me animaba. Hace tres años decidí hacer un curso en el taller Cuit de Valencia y ahí empezó todo.
Me encanta trabajar con las manos y el proceso de la cerámica es casi como un juego, pasar de la idea bidimensional que tienes en mente a una pieza con volumen. Jugar también con los límites de lo funcional y lo artístico, crear piezas utilitarias como tazas o platos y construir otras totalmente decorativas como jarrones. Para mi es importante mezclar lo artesano, lo que tiene una función y un propósito definido con lo meramente artístico, decorativo o contemplativo.Recientemente comenzaste con tu propio taller proyecto Plou estudi, cómo ha sido este cambio?
Llevo mucho tiempo con esta idea en la cabeza, crear un espacio de trabajo en el que poder desarrollar mis propios proyecto pero que sea también un lugar donde poder compartir y colaborar con otros artistas. Donde poder enseñar y compartir con cursos y talleres relacionados con la cerámica y la pintura. Además, un espacio donde poder mostrar lo que hago y lo que se hace en este espacio de trabajo y donde poder traer los proyectos de artistas amigas y de esta forma, exponer lo que se hace actualmente en Valencia y también fuera de ella.
Como decía llevo mucho tiempo pensando en esto y finalmente, ha llegado el momento de poder hacerlo.¿Crees que hay un resurgimiento del interés por la cerámica?
Valencia siempre ha sido una ciudad muy relacionada con la cerámica, forma parte de nuestra tradición además de por la cercanía con Manises y su escuela de cerámica. Pero es verdad, que desde hace tiempo hay un boom con todo lo relacionado con la cerámica, tanto con los creadores como con el público y la gente que consume este tipo de productos. Se está poniendo en valor lo artesano, lo hecho a mano y lo único.
¿Un referente clave para tu obra?
Pues los referentes van cambiando pero es verdad que ceramistas como Xanthe Somers o Brutes London me encantan y me inspiran. Aunque no siempre son solo ceramistas, artistas como Antonio Ladrillo o Sofia Shizas me acompañan en los procesos de creación y podría decir que también son referentes.
Háblanos de la colaboración con Teulat, ¿Cómo ha sido trabajar con ellos? ¿Qué retos ha implicado?
Ha sido un placer y también un reto hacer tantas piezas, he aprendido mucho de procesos y tiempos y los resultados son piezas hechas a mano una a una con sus marcas y sus diferencias. El detalle de la “etiqueta” de distintos colores con el nombre de Teulat a un lado del bote lo relaciona directamente con la marca. Nunca había hecho piezas que acabaran siendo recipientes para velas, me ha parecido super interesante tanto el momento de producción como el resultado.
¿Una pieza favorita de Teulat?
Pues es difícil! Todos los sillones me parecen preciosos pero me decantaría por las dos mesas Arq, tanto la de centro como la auxiliar. Con formas geométricas pero acabados redondeados, son piezas completamente utilitarias pero al mismo tiempo con un valor estético muy alto.
¿Hay alguna pieza que aun no hayas podido hacer pero que desees crear?
Ahora mismoestoy trabajando con piezas pequeñas, mini jarrones, me gusta la idea de trabajar con diferentes dimensiones y con los equilibrios de las formas.
